
Muelas del juicio retenidas: cuáles son sus síntomas y complicaciones
Algunos pacientes tienen la suerte de desarrollar las muelas del juicio sin problema y de forma totalmente sana, pero no siempre es lo habitual. Hablamos de muelas del juicio retenidas cuando estas no tienen suficiente espacio para erupcionar o bien no pueden hacerlo de forma adecuada, de modo que la retención puede ser total, no llegando a atravesar la encía, o parcial, erupcionando solo parte de la corona. Ya que hemos tratado todo tipo de muelas del juicio en Alcorcón, queremos contarte los síntomas de esta afección y qué complicaciones puede generar. ¡Atento!
Síntomas de las muelas del juicio retenidas
Cuando tenemos las muelas del juicio retenidas, pueden presentarse algunos síntomas como:
- Encías irritadas o inflamadas.
- Sangrado gingival.
- Dolor en la mandíbula.
- Mal aliento.
- Dificultad para abrir la boca.
- Sensación de sabor raro.
- Mandíbula ligeramente hinchada.
Si llevas un tiempo notando todos o una gran mayoría, te recomendamos que pidas cita con nosotros lo más pronto posible, para evitar que la situación se complique aún más.
Complicaciones de las muelas del juicio retenidas
Tener las muelas del juicio retenidas puede desencadenar en otros problemas de menor o mayor gravedad para nuestra salud bucodental:
- Caries. Si erupcionan parcialmente, las muelas del juicio son más difíciles de limpiar y estarán expuestas a un mayor riesgo de caries.
- Perjuicios en los dientes. Una muela de juicio retenida puede provocar apiñamiento en el resto de la dentición, o bien presionar el segundo molar y aumentar el riesgo de sufrir una infección.
- Formación de quistes. Las muelas del juicio se forman en un saco alojado dentro de la mandíbula, el cual puede llenarse de líquido y formar un quiste que dañe la mandíbula, el hueso o el nervio.
- Pericoronaritis. Al ser más difíciles de limpiar, las muelas del juicio parcialmente retenidas pueden provocar inflamación y dolor en la encía de la zona, llamada pericoronaritis, una situación más compleja que requiere de un tratamiento vigilado.
Lo mejor que puedes hacer para evitar estas complicaciones y mantener a raya los síntomas de las muelas del juicio retenidas, es visitar a tu dentista cada 6 meses o con la frecuencia que te recomiende.
Lo más importante es que, si sientes alguna molestia, no la dejes pasar. ¡Cuenta siempre con nosotros!
Deja una respuesta